... Y aconsejan los filósofos naturales que no haya el hombre ayuntamiento a su mujer enojado ni airado, ni triste ni embriagado, porque acontece engendrar los hijos con esas condiciones y pasiones. Y de aquí viene el padre alegre a engendrar un hijo triste, porque lo estaba él cuando lo engendró. Y dice Alejandro Afrodiseo una cosa harto de notar: que por esa razón salen algunas veces los hijos bastardos y adulterinos malos y viciosos, por la mala imaginación y temor que sus padres tuvieron en su generación.
Pedro Mexía
"Silva de varia lección", 1540
"Poder de la imaginación"
No hay comentarios:
Publicar un comentario